Queda muy poco para que podamos disfrutar de la Semana Santa de Málaga, declarada Fiestas de Interés Internacional desde 1980. Toda la ciudad se prepara para ofrecer un caleidoscopio de estampas asombrosas de arte, tradición, religiosidad popular, y una espectacular puesta en escena en las calles del centro histórico. Al bullicio habitual de esta capital cosmopolita y abierta, hay que sumar la alegría con la que los malagueños toman cada uno de los rincones para vivir esta festividad de los sentidos y del espíritu.
Como es sabido, se trata de una Semana Santa muy diferente a las de otras capitales andaluzas, como Sevilla, Cádiz, Córdoba o Granada; lo que llevó a la revista National Geographic a situarla entre las 11 mejores de España. En este breve artículo destacaremos algunas de las diferencias más llamativas:
Sus enormes tronos:
A diferencia de otras ciudades, en Málaga no debemos referirnos a “pasos”, sino a “tronos”. Se trata de gigantescas estructuras sostenidas por los hombros, no por la cervid, de ahí que quienes los portan sean conocidos como “hombres y mujeres de trono”. Los tronos cuentan con varales, piezas de metal o madera de varios metros de longitud que sobresalen de la estructura del trono. Por tanto, no se trata de costaleros, y esta particular forma de llevar los tronos marca una diferencia importante que se traslada al movimiento, al ritmo y a la presencia de las procesiones en las calles. En este sentido, es fundamental el trabajo de los “mayordomos de trono”, que a través de la campana del trono definen los movimientos:
–Varios toques seguidos: para colocarse.
–dos toques: para que los hombres y mujeres de trono se meten bajo el varal.
–Un toque más pausado: para indicar la subida o bajada del trono.
–Tres toques seguidos y uno más pausado: para señalar la subida a pulso.
Un origen curioso. La mala relación entre las cofradías y el clero provocó que muchas hermandades abandonaran las iglesias como punto de inicio y final de sus procesiones, y montaran los tronos bajo precarias estructuras al aire libre conocidas como “tinglaos”, y más tarde en sus propias casas de hermandad. El hecho de no verse limitados por las puertas de los templos, provocó que los tronos crecieran hasta extremos insospechados. Las casas de hermandad que jalonan las calles den centro, con sus enormes puertas, son un ejemplo de arquitectura adaptada a esta circunstancia.
El trono más grande del mundo. Para que nos hagamos una idea de la monumentalidad de estos tronos, el de la Virgen de la Esperanza, que procesiona cada Jueves Santo en Málaga, pesa 4,1 toneladas, y tiene casi 14 metros de largo de varales, más de cuatro metros de ancho y más de 6 metros de altura. Es portado por 257 personas que no tienen relevo durante toda la procesión.
Los pulsos
Las características propias de estos tronos, y su forma de llevarlos al hombro, dieron origen también a otra característica propia de la Semana Santa de Málaga: los pulsos. Al ejecutar este movimiento, los hombres y mujeres de trono levantan el trono con las palmas de las manos hasta situarlos por encima de sus cabezas. Esta delicada maniobra se lleva a cabo cuando el mayordomo de trono da tres toques a la campana de atención y luego uno para ejecutar la maniobra. Cuando vuelve a tocar los tres toques de atención y al siguiente toque se vuelve a colocar el trono sobre los hombros.
La Semana Santa extendida: los traslados
Los días previos y posteriores a la Semana Santa se llenan de actos y cultos que los cofrades viven cada año con una frenética actividad Si quieres disfrutar de la versión “extendida” de la Semana Santa de Málaga tienes que vivirla como un malagueño más, asistiendo a los tradicionales “traslados”.
Los traslados se producirán este año entre el 18 y el 23 de marzo. Se trata de pequeñas procesiones en los que las imágenes (las esculturas que procesionan) son llevadas en pequeños tronos desde sus iglesias hasta la casa de hermandad, donde serán subidas a los tronos desde los que recorrerán las calles de Málaga el día de la procesión oficial. En muchos casos también se producen traslados de vuelta, donde las imágenes regresan a sus iglesias tras sus desfiles procesionales.
Una tribuna privilegiada
Oledays te ofrece la oportunidad de vivir la Semana Santa desde una tribuna privilegiada. La mayoría de nuestros alojamientos se sitúan en el centro de la ciudad, muchos de ellos con balcones en algunas de las calles más populares, por lo que ofrecen perspectivas únicas de la Semana Santa. Destaquemos algunas de ellas:
–La Catedral de Málaga. El templo más importante de la ciudad y una de las catedrales más bellas de España. Alrededor disponemos de varios alojamientos con balcones, en calles tan emblemáticas como Molina Lario, Cister y Cañón.
–Plaza de la Constitución. Auténtico epicentro de la Semana Santa malagueña. Olédays ofrece la oportunidad de disfrutar de la tribuna más privilegiada, en un alojamiento con todas las comodidades.
–San Juan. Vive la emoción de la salida y de la cofradía María Santísima de Lágrimas y Favores en la Iglesia de San Juan, en la que no falta su hermano más conocido, el actor Antonio Banderas.
–La Merced y San Francisco. Dos plazas para vivir toda la intensidad de la Semana Santa y sus tradiciones.
Infórmate sobre nuestros balcones, y los mejores alojamientos para disfrutar de la Semana Santa.